La Organización Meteorológica Mundial (OMM) reportó que entre enero y septiembre de este año, la temperatura media global se incrementó en 1,54 grados Celsius en comparación con la era preindustrial, acercándose peligrosamente al umbral que, de superarse de forma continua, generaría efectos devastadores para el planeta. Pese a esta alarmante tendencia, la OMM aclaró que el aumento a largo plazo aún se mantiene por debajo de dicho umbral.
Coincidiendo con la apertura de la COP29 en Azerbaiyán, el Boletín del Estado del Clima de la OMM reveló también que la extensión de hielo en la Antártida alcanzó niveles mínimos históricos y que el derretimiento de glaciares y el aumento del nivel del mar se aceleran. La década 2015-2024 está en camino a ser la más cálida registrada, incrementando el riesgo de fenómenos climáticos extremos.
La OMM subrayó que aunque el calentamiento actual supera temporalmente el límite de 1,5ºC, factores como el fenómeno de El Niño y otras anomalías naturales pueden influir en estas variaciones. Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, advirtió que los recientes desastres climáticos son parte de una “nueva realidad”, que ejemplifica cómo el aumento de la temperatura intensifica los episodios de clima extremo, como lluvias torrenciales, incendios y olas de calor, afectando de forma crítica a las comunidades y economías globales.
